A pesar del aumento del consumo del tabaco entre los menores, las empresas tabaqueras, a pesar de lo que a veces se piensa, tienen como responsabilidad evitar que los menores se inicien en este hábito y su compromiso llega a niveles que pocos de nosotros podríamos imaginar. Para demostrar este compromiso,  veamos unos ejemplos sobre la manera que tienen las tabacaleras, en este caso Brittish American Tobacco, de afrontar las comunicaciones del tabaco que afecten a los jóvenes.

-                   -  Las estrategias de marketing y publicidad están desarrolladas con el fin de no ser atractivas particularmente para los menores.

-                   - Se evita aparecer en publicaciones impresas a no ser que al menos un 75 por ciento del mínimo de los lectores sean adultos.

-                   - No es colocada ningún tipo de valla publicitaria cerca de colegios o institutos.

-                   -  La publicidad por internet está limitada también a páginas exclusivamente de adultos.

-                   - No se patrocinan eventos en los que tanto participantes como audiencia no sean adultos.

-                   - Se evita el contacto directo con los consumidores que no puedan demostrar ser adultos.

Además de esto, en algunos países las propias empresas tabaqueras realizan programas de prevención del consumo de tabaco entre menores (imagen a continuación), incluso en algunos países es posible que sean las únicas iniciativas de prevención del consumo entre menores que existan.

Con esto esperamos que se aprecie el compromiso de las tabacaleras en el complejo problema que supone el consumo de tabaco por parte de los menores, el cual debe encontrar la solución con ayuda de todos.